jueves, 21 de julio de 2011

OVNIs en Alemania y Francia

Fenómeno ovni en Nüremberg de 1561
En una octavilla elaborada en madera en 1566 por el artista Hans Glaser se describe un evento acaecido en Nüremberg cinco años antes, en el momento de la salida del Sol, el 14 de abril de 1561. Dicha representación se conserva en la colección Wickiana, en la biblioteca central (Zentralbibliotel) de Zúrich. En esta colección también se incluye una ilustración sobre un fenómeno celeste acaecido en Basilea en 1566.
Esta octavilla procede de Núremberg y cuenta la nueva de una «muy horripilante aparición» en el momento de la salida del Sol, el 14 de abril de 1561. Fue vista «por muchas personas, varones y mujeres». Eran «esferas» de color rojo sangre, azulado y negro, o «discos anulares», cerca del Sol, «tres por ejemplo en fila / a veces cuatro en cuadrado, y también algunas solas / y también se han visto entre esas esferas algunas cruces de color sangre». Había también «dos grandes tubos» (o tres)... «en cuales pequeños y grandes tubos / estaban de a tres / también de a cuatro y más esferas. Y todos ellos comenzaron a pelearse entre sí». El fenómeno duró aproximadamente una hora. Luego «todo ello como ofuscado por el Sol / cayó a la Tierra desde el cielo como si todo ardiera / y con gran vapor desapareció poco a poco sobre la Tierra». También se vio, bajo las esferas, una figura alargada, «igual que una gran lanza negra». Naturalmente, esta «visión» se entendió como advertencia divina.(fig.1)
fig.1


LA BATALLA DE OVNIS SOBRE GÉNOVA
En agosto de 1608, los habitantes del Sur de Francia y del Noroeste de Italia, desde Marsella hasta Génova, asisten a una auténtica oleada de ovnis (Objetos Voladores No Indentificados), debidamente contada en una crónica de la época titulada "Discursos de las terribles y espantosas señales aparecidas sobre el mar de Génova".
He aqui uno de los más antiguos documentos descubierto hace poco (aunque no el único en su especie), fechado en 1608, y redactado por un tal Pierre Ménier, de profesión editor sito en la Puerta de Saint-Victor (París); aqui no se trata de "platillos volantes" dado que el término es del siglo XX. El documento se presenta bajo una forma de antiguo librillo que tanto pululaban durante el siglo XVII. El relato abarca siete páginas y está escrito en francés...

"Discurso de las terribles y espantosas señales aparecidas sobre el mar de Génova a principios del mes de agosto pasado, con los prodigios de la sangre caída del cielo en forma de lluvia del lado de Niza y en varios lugares de la Provenza, asi como la aparición de dos hombres en el aire los cuales se batieron repetidas veces, sobre la isla de Martigues que es una villa sobre el mar a cinco leguas de Marsella." 
 
El tal Pierre Ménier habla de lluvia de sangre, fenómeno meteorológico de sobras conocido en nuestros días, y que debía ser sin duda una de esas lluvias venidas del Norte de Africa y enrojecidas por la presencia de microorganismos. El testigo y escritor interpretaba ese fenómeno como una expresión de la cólera de Dios.

"A principios del mes de agosto del año mil seiscientos ocho, sobre el mar de Génova se han visto las más horribles señales que de memoria de hombre se ha hablado jamás, ni escrito, unos teniendo forma humana con brazos que parecían estar cubiertos de escamas, y en cada una de sus manos llevaban dos horribles serpientes voladoras que se enroscaban alrededor de sus brazos surgiendo al parecer desde la altura de sus ombligos, volando muy arriba por encima del mar y profiriendo gritos horribles, cosa que era del todo espantoso y, a veces, se sumergían en las aguas para salir nuevamente a una distancia más lejana. Sus gritos eran tan espantosos que varias personas cayeron enfermas por el miedo sufrido. Se veían algunas figuras con forma de mujer. Otros tenían el cuerpo similar al cuerpo humano, todo recubierto de escamas pero con la cabeza en forma de dragón."
Tengamos en consideración que para esos acontecimientos tan extraordinarios, el autor los compara con elementos que le son familiares y propios de su época. Por ejemplo, la "cabeza en forma de dragón", ¿qué se supone que era un dragón para la gente de entonces? Sea como fuere, los Genoveses vieron formas
metálicas surgir de las aguas del Mediterráneo, desplazándose bajo el mar y produciendo un ruido infernal. Puesto que esas "apariciones" o manifestaciones insólitas se reproducen sucesivamente en ese mes de agosto, las autoridades decidieron pasar al ataque.

"La señoría mandó disparar algunos cañones para procurar echarlos del lugar, y les fueron disparados unos ochocientos cañonazos, pero en vano, pues no parecieron extrañarse de ningún modo."

¡Nada menos que 800 cañonazos! Ochocientos disparos que no dieron resultado alguno y, el 15 de agosto día de la Asunción, las cosas se pusieron aún más serias para los Genoveses. Desde hacía dos semanas vivían en un permanente estado de angustia:

"El décimo quinto día de agosto, aparecieron sobre el dicho mar del Puerto de Génova tres carrozas arrastradas cada una por seis figuras de fuego que parecían dragones. Y los mencionados carruajes marchaban en direcciones contrarias de unos y otros, y arrastrados por las figuras encendidas con sus serpientes, continuando con sus espantosos gritos y aproximándose de muy cerca a Génova, tanto que los espectadores, al menos la mayor parte, huyeron asustados temiendo los efectos de tales prodigios, pero cuando hicieron por tres veces el recorrido a lo largo del puerto después de proferir gritos tan potentes de ruido que hicieron temblar las montañas de los alrededores, se perdieron todos en el mar y, desde entonces, no se vio ni se tuvo noticia de ellos." 

Y prosigue:

"Todo esto ha dado lugar a grandes perjuicios para muchos ciudadanos de Génova, unos habiendo muerto de miedo como el hijo del Signore Gasparino de Loro, así como el hermano del Signore Antonio Bagatelo; varias mujeres también perecieron de terror. Desde que cantamos el te deum, se han desvanecido."

jueves, 30 de junio de 2011

OVINS EN PHOENIX

En el número correspondiente al Invierno de 2000, el Journal of Scientific Exploration incluye un extenso trabajo firmado por Ann Druffel (conocida ufóloga estadounidense), Robert M. Wood (científico aeroespacial famoso en los ambientes ufológicos por sus análisis en defensa de los documentos "Majestic 12") y Eric Kelson (experto en tratamiento de imágenes por ordenador) donde presentan sus consideraciones sobre una famosa serie de fotografías cuyos originales han salido de nuevo a la luz treinta años después.
El caso
   
Primera de las fotos tomadas por Rex Heflin
Segunda fotografía
Foto número 3
Cuarta fotografía
El 3 de agosto de 1965, sobre las 12:30 horas (PDT), Rex Heflin, de 38 años, estacionaba su camioneta a poco más de 2 kilómetros del perímetro de la base naval de El Toro, cerca de la ciudad de Santa Ana (California). Algunas ramas de un árbol tapaban parcialmente una señal de paso a nivel y Heflin, en su calidad de ingeniero encargado del mantenimiento viario del condado de Orange, se detuvo a fotografiarlas. Intentó comentar la situación con su supervisor a través de el radiotransmisor del coche, pero éste no funcionaba.
Todavía en el interior de la cabina, se disponía a fotografiar la señal con su cámara Polaroid modelo 101, cargada con una película de 3000 ASA, cuando notó de reojo a su izquierda algo moviéndose. Al mirarlo mejor pudo ver que se trataba de una extraña nave plateada y con forma de sombrero de paja que cruzaba lentamente sobre la carretera de izquierda a derecha, a unos 50 metros de altura y a unos 200 metros de distancia. Rápidamente disparó su cámara, obteniendo la primera foto a través del parabrisas delantero. La nave siguió su trayectoria con un cierto bamboleo, revelando una panza de color oscuro de la que parecía salir un rayo de luz rotatorio de color verdoso. Tomó entonces la segunda fotografía por la ventana del pasajero. El objeto siguió alejándose, pero aún tuvo tiempo de disparar una tercera vez, antes de que aumentase su velocidad y altura perdiéndose sobre la autopista de Santa Ana. Todo el avistamiento había durado apenas 20 segundos. La nave dejó tras de sí un anillo como de humo que Heflin fotografiaría, tras acercarse más al lugar con su camioneta.
Pensando que se trataba simplemente de algún prototipo experimental, Heflin volvió a su trabajo notando que el radiotransmisor volvía a funcionar. Sin embargo, no mencionó nada de lo ocurrido hasta la tarde cuando se reunió con algunos compañeros de trabajo. Éstos empezaron a pedirle copias y algunas de ellas llegaron a manos del periódico local, el Santa Ana Register, que las publicaría el 20 de septiembre, seis semanas después de ocurridos los hechos, sin pedir permiso al autor ni pagarle nada.
Sin embargo, antes de su publicación en prensa, el caso ya había llegado a conocimiento de los militares (quizá por las gestiones del propio periódico). Tanto la Marina como la Fuerza Aérea entrevistaron al testigo durante varias horas, le solicitaron los originales (sólo de las tres primeras fotos, pues el testigo había decidido no mostrar más la foto del anillo de humo con el argumento de que "tres fotos eran bastantes para un día") y tras realizar las copias oportunas se las devolvieron sin problemas.
También uno de los grupos ufológicos privados más importantes de la época (el NICAP) había tenido noticias de lo ocurrido antes de la publicación de las fotos y ya el 18 de septiembre, el ingeniero Edward Evers obtuvo una declaración firmada del testigo.
Sin embargo, el propio día en que aparecieron en el periódico local las fotografías, Heflin asegura haber recibido la llamada de una persona que, identificándose como coronel del NORAD, concertó una cita con él para dos días más tarde, recomendándole que no siguiese hablando con la prensa. En la noche del 22 de septiembre, dos personas que exhibieron unos carnets sin foto similares a los empleados por sus visitantes militares anteriores, se presentaron en su casa, le solicitaron los tres originales... y Heflin nunca más volvió a verlos.
Pese a los esfuerzos del propio testigo, del NICAP y del propio congresista del condado, la identidad de esos "hombres del NORAD" sigue siendo un misterio 35 años después.

sábado, 25 de junio de 2011

LOS NEFILIM

Los nefilim (los caídos, o gigantes) fueron el producto de las relaciones sexuales entre los hijos de Dios y las hijas de los hombres en Génesis 6:1-4. Existe mucho debate acerca de la identidad de los “hijos de Dios.” Nuestra opinión es que los “hijos de Dios” eran ángeles caídos (demonios) quienes se unieron con mujeres humanas. De estas uniones resultó una raza, los nefilim, una raza de gigantes, quienes fueron “los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre” (Génesis 6:4).
De acuerdo a los hebreos y otras leyendas (el libro de Enoc y otros escritos no bíblicos), ellos fueron una raza de gigantes y super-héroes, quienes cometieron actos de gran maldad. Su gran tamaño y poder parecía venir de la mezcla del “DNA” demoníaco con la genética humana. Todo lo que la Biblia dice directamente acerca de ellos, es que fueron “valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.” (Génesis 6:4) Los nefilim no fueron extraterrestres, ellos fueron literalmente, seres físicos producidos por la unión de los hijos de Dios y las hijas de los hombres (Génesis 6:1-4).
Los nefilim fueron una de las razones principales para el gran diluvio en los tiempos de Noé. Inmediatamente después de que los nefilim son mencionados, la Palabra de Dios nos dice esto, “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en Su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.” (Génesis 6:5-7) Así que Dios procedió a inundar el mundo entero, matando a todos y a todo (incluyendo esta raza de gigantes) a excepción de Noé y su familia, y los animales dentro del arca (Génesis 6:11-22).
Génesis 6:4 nos dice, “Había gigantes en la tierra en aquellos días,…… y también después…” Parece que los demonios volvieron a repetir su pecado en algún tiempo posterior al diluvio. Sin embargo, pareciera que esto sucedió en una escala mucho menor de lo que fue antes del diluvio. Cuando los israelitas espiaron la tierra de Canaán, ellos reportaron a Moisés – “También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.” (Números 13:33). Ahora, este pasaje no dice específicamente que los nefilim o gigantes genuinamente estuvieran ahí, solo que los espías pensaron que vieron a los nefilim. Es más probable que los espías se encontraron con gente muy alta en Canaán y por error, creyeron que eran los nefilim. O, es posible que después del diluvio, los demonios nuevamente se hubieran unido con mujeres humanas, produciendo más gigantes. Cualquiera que haya sido el caso, estos “gigantes” fueron destruidos por los israelitas durante su invasión a Canaán (Josué 11:21-22) y más tarde en su historia (Deuteronomio 3:11; 1 Samuel capítulo 17).
Aqui les dejamos unas imagenes de una supuesta excavacion en grecia:
image003 199x300 PRESUNTOS ESQUELETOS DE NEFILIM Y SU POSIBLE RELACIÓN CON LAS PIRÁMIDES DE EGIPTO       image005 300x271 PRESUNTOS ESQUELETOS DE NEFILIM Y SU POSIBLE RELACIÓN CON LAS PIRÁMIDES DE EGIPTO

image006 200x300 PRESUNTOS ESQUELETOS DE NEFILIM Y SU POSIBLE RELACIÓN CON LAS PIRÁMIDES DE EGIPTO    image009 300x195 PRESUNTOS ESQUELETOS DE NEFILIM Y SU POSIBLE RELACIÓN CON LAS PIRÁMIDES DE EGIPTO
despues de ver esto......... la pregunta es: ¿estamos realmente solos?